La lengua es un órgano imprescindible para poder hablar, masticar, saborear. Por ello, debes cuidar y protegerla de cualquier enfermedad o lesión.
Existen muchas enfermedades que afectan a nuestra lengua, pero hoy queremos hablarte sobre la glositis. Esta patología causa un aumento de tamaño de nuestra lengua, creando una textura lisa en la superficie y un cambio de aspecto por tonalidades rojas.
En la gran mayoría de los casos la glositis no es una enfermedad grave, suele ser molesta e incómoda ya que pierdes las papilas gustativas, y debido al hinchazón puede influir a la hora de poder hablar.
La glositis suelen ser causadas por enfermedades que afectan al sistema inmunitario, como por ejemplo pueden ser un herpes bucal, deficiencias vitamínicas o nutricionales. Otra causa puedan ser una reacción alérgica a un alimento, medicamento o dentífrico. O por padecer xerostomía, o más conocido por tener la boca seca. Otra de las razones podría ser una lesión como traumatismos debido a prótesis, implantes, quemaduras, etc.
Pero no debes alarmarte, esta inflamación lingual puede combatirse con un tratamiento adecuado. Lo primero que se debe hacer es visitar a un especialista que te recete algún tipo de tratamiento para combatir la infección y el dolor, en muchas ocasiones aparecen bacterias u hongos.
Para evitar que no se aumente la irritación, lo más recomendable es evitar los alimentos demasiados calientes, picantes, beber alcohol o fumar. Y no debemos olvidar mantener unos buenos hábitos de higiene oral, cepillando tus dientes después de cada comida, además de cepillar suavemente nuestra lengua dos veces al día.
Contenido supervisado y validado por el Dr. Juan Ballesteros Martínez, Director Médico de Clínica la Victoria.