¿Qué es un injerto de encía?

Un injerto de encía es un procedimiento periodontal que consiste en tomar tejido de la boca del paciente o de otro donante para trasplantarlo en las áreas de la encía que se han visto afectadas por la recesión gingival. La recesión gingival ocurre cuando la encía retrocede, dejando expuesta la raíz del diente, lo que puede causar sensibilidad dental, caries y, en casos graves, pérdida del diente. Los injertos de encía pueden ayudar a prevenir la recesión gingival y mejorar la salud dental.

A continuación pasaremos a mostrar cómo es el proceso de injerto de encía a la vez que algunos consejos para la posterior recuperación.

Proceso del injerto de encía

El proceso del injerto de encía generalmente implica una serie de etapas. ¿Cuáles son concretamente? Te las detallamos:

Anestesia local. El dentista administrará anestesia local para adormecer la encía y reducir cualquier molestia durante el procedimiento.
Preparación del sitio donante. Si se va a utilizar tejido del paladar del paciente, el dentista preparará el área extrayendo una pequeña porción de tejido. Si se va a utilizar tejido donado, se preparará y se mantendrá listo para su trasplante.
Preparación del sitio receptor. El dentista se encargará de preparar el área donde se injertará el tejido de encía, asegurándose de que esté limpio y libre de bacterias.
Inserción del injerto de encía. Se coloca el tejido de encía en la zona receptor y se asegura en su lugar con puntos de sutura.
Control y seguimiento. El paciente debe asistir a consultas de seguimiento para monitorear la evolución del injerto y asegurarse de que se esté curando adecuadamente.

Consejos para la recuperación en el injerto de encía

Después de un injerto de encía, es importante seguir las siguientes recomendaciones para que la recuperación sea lo más efectiva posible:

Descansar y dormir bien. Solamente de esta forma el cuerpo se recuperará al 100%.
Evitar la ingesta de alimentos duros y picantes. Pueden irritar la zona y hacer que la curación se entorpezca.
Cepillar los dientes de forma suave. En ese caso, el paciente deberá adquirir un cepillo de lavado de dientes suave, evitando así potenciales males bucales.
Uso de un enjuague bucal. Recuerda utilizar aquellos sin alcohol que contengan en su composición clorhexidina. Imprescindibles para prevenir infecciones.
No fumes. Evita el tabaco, ya que, además de ser nocivo para el organismo, retrasará la cura del injerto. Aumentará a su vez el riesgo de infección.

Como has podido comprobar, cuidar la salud de tus encías es esencial para mantener una correcta higiene bucal. En nuestro dentista en Córdoba queremos que saques la mayor de la sonrisa, sin complejos. Reserva tu cita y conoce a nuestro excelente equipo de profesionales.