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Retenedores dentales

Retenedores dentales: la clave para mantener tus dientes alineados

El tratamiento de ortodoncia no termina cuando retiramos los brackets o los alineadores, sino que continúa con los retenedores dentales. Esta segunda parte, es tan importante como la primera, debido a que nos permite mantener los dientes en el lugar correcto y evita que vuelvan a deformarse. 

¿Qué son los retenedores dentales y por qué son importantes después de un tratamiento de ortodoncia?

Los retenedores dentales son dispositivos diseñados para mantener los dientes en su nueva posición después de haber completado un tratamiento de ortodoncia, ya sea con brackets o alineadores transparentes. Tras la corrección de la mordida y la alineación de los dientes, los tejidos circundantes aún necesitan tiempo para adaptarse y estabilizarse. El paciente necesita los retenedores para evitar que los dientes vuelvan a su posición original, un proceso llamado «recidiva».

Sin el uso adecuado de esta parte del tratamiento, el esfuerzo invertido en alinear los dientes puede perderse, llevando a la necesidad de repetir todo el proceso. Es por eso que en nuestra clínica siempre enfatizamos la importancia de este último paso.

Tipos de retenedores dentales: ¿cuál es el ideal para ti?

Existen diferentes tipos de retenedores y la elección del más adecuado depende de cada caso particular. A continuación, describimos los principales tipos para que puedas tomar una decisión informada.

Retenedores fijos

Son finos alambres adheridos en la parte interna de los dientes frontales, tanto en el arco superior como en el inferior. Este tipo de retenedor es permanente, lo que significa que no hay que preocuparse por quitárselo o perderlo. Sin embargo, requiere una higiene oral cuidadosa, ya que el alambre puede acumular placa si no se limpia adecuadamente.

Retenedores removibles

En este caso, son dispositivos de plástico transparente o acrílico con alambres que se ajustan a la boca y se pueden quitar y poner según sea necesario. La principal ventaja de los retenedores removibles es que son fáciles de limpiar y permiten mayor flexibilidad, porque se pueden usar solo durante la noche después de un periodo inicial de uso continuo. Sin embargo, su efectividad depende de la disciplina del paciente para utilizarlos según las indicaciones del dentista.

¿Cuánto tiempo debo usar mi retenedor dental?

La duración del uso de los retenedores depende de varios factores. Cada paciente es diferente y el tiempo recomendado variará según la complejidad del tratamiento y la estabilidad inicial de los dientes.

Factores que influyen en el tiempo de uso

El tipo de corrección que se haya hecho, la edad del paciente y la forma de la mandíbula pueden influir en cuánto tiempo será necesario usar el retenedor. Generalmente, se recomienda usar el retenedor todo el día durante los primeros meses después del tratamiento. Luego, el tiempo de uso puede reducirse a solo por la noche, pero algunos pacientes deben usarlo de manera indefinida para garantizar que los dientes no vuelvan a moverse.

¿Qué pasa si dejo de usar mi retenedor?

Dejar de usar el retenedor puede llevar a que los dientes se desplacen gradualmente hacia sus posiciones originales. Esto es especialmente común en los primeros meses después de terminar el tratamiento ortodóntico. Incluso después de años de haber completado el tratamiento, pueden ocurrir algunos movimientos leves. Por eso, es importante seguir las recomendaciones de uso del ortodoncista para evitar tener que realizar tratamientos correctivos adicionales en el futuro.

Cuidado y mantenimiento de tus retenedores dentales

Para que tus retenedores sigan funcionando correctamente y duren el mayor tiempo posible, es necesario cuidarlos adecuadamente. Aquí te damos algunos consejos para mantener tus retenedores en buen estado.

Cómo limpiar tus retenedores correctamente

Si usas un retenedor removible, límpialo con un cepillo suave y agua tibia diariamente. Evita usar agua caliente, ya que puede deformar el plástico. También puedes emplear pastillas efervescentes especiales para una limpieza más profunda. Si tienes un retenedor fijo, asegúrate de cepillar cuidadosamente alrededor del alambre y usar hilo dental.

¿Qué hacer si se rompe o se pierde mi retenedor?

Si tu retenedor removible se rompe o se pierde, es importante que contactes a tu ortodoncista lo antes posible para reemplazarlo y evitar que los dientes se desplacen. No intentes arreglarlo por tu cuenta. En el caso de retenedores fijos, si notas que el alambre se ha soltado o está dañando tus encías, agenda una cita inmediatamente para repararlo.

En Clínica La Victoria, tratamos a nuestros pacientes en todas las fases del proceso, desde la ortodoncia hasta su posterior mantenimiento. Si tienes cualquier duda sobre el estado de tu tratamiento o necesitas revisión de tus retenedores, pídenos cita en nuestra clínica dental en Córdoba. 

 

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